La RSC en Saba
Saba es consciente de que los mejores resultados siempre están vinculados a las mejores maneras de operar. Avanzar hacia una competitividad sostenible y socialmente responsable es un reto de excelencia para las empresas de primer nivel. Es caminando hacia esos criterios sostenibles y socialmente responsables que Saba conseguirá el nivel de excelencia adecuado para consolidarse como la compañía de referencia que es y que aspira a seguir siendo. Saba integra todos los aspectos relativos a la Responsabilidad Social Corporativa como un factor inherente a la toma de decisiones. La sostenibilidad y el compromiso con la sociedad se incorporan en los procesos de gestión interna, al mismo nivel que otros factores como el análisis de rentabilidad de los proyectos, el coste de financiación, la estrategia comercial o las tecnologías de la información, entre otros aspectos.
El conjunto de la organización participa y colabora, en la medida de lo posible, en la implementación de la cultura de RSC que se ha establecido. Algunos de sus principales pilares son el compromiso con el medio ambiente, relacionado con la movilidad sostenible; la colaboración con asociaciones, organizaciones y comunidades locales en las que la Saba desarrolla su actividad; y el medio ambiente. Todo ello, junto con la calidad del servicio ofrecido al cliente, como identidad de marca, y los aspectos sociales y éticos correspondientes, conforman los elementos diferenciadores de la compañía. La integración y consolidación de la RSC en el negocio permitirá a Saba fortalecer la transparencia y la correcta gestión de los grupos de interés.
Personas
Contratos indefinidos
Equipo humano e integración laboral
Las personas que conforman Saba son la base esencial para sostener lo que se podría denominar como el estilo Saba: cultura de servicio al cliente, compromiso con el entorno, responsabilidad y honestidad con los proveedores e implicación con la sociedad. La compañía trabaja para garantizar la igualdad de oportunidades y la no discriminación por razón de género, raza, país de origen, religión o edad. De hecho, año tras año los índices de igualdad de género en la plantilla son cada vez más positivos.
Saba involucra a toda la organización para asegurar el cumplimiento de las mejores prácticas de Buen Gobierno Corporativo, siempre bajo el techo de la Misión, los Valores, el Código Ético y la estrategia de negocio y desarrollo de la empresa. Todo ello, con la interacción con los grupos de interés, permite obtener un feedback constante y reforzar las expectativas en materias como calidad, información o transparencia. Asimismo, este año continúa el impulso del Manual de Prevención de Delitos, aprobado en el 2017 por parte del Consejo de Administración de la compañía y que ya se ha adaptado a Portugal.
En este capítulo, otro de los ejes de actuación pasa por el trabajo continuo de Saba hacia la integración laboral, con la firma de acuerdos con empresas y fundaciones que faciliten la inserción de colectivos con dificultades para incorporarse al mundo laboral. Destaca aquí el apoyo a la Fundación Envera, que trabaja en el conjunto de España para la inclusión socio-laboral de personas discapacitadas, dando atención en todo su ciclo de vida; y la adhesión al Programa Incorpora de la Obra Social “La Caixa”, una iniciativa basada en la intermediación laboral que tiene como objetivo facilitar la integración en el mercado de trabajo a personas en riesgo de exclusión social.
Saba no solamente apoya a asociaciones externas, sino que también aplica la cultura de inclusión laboral de personas en riesgo de exclusión en su propia organización. Actualmente, el 3,6% de la plantilla de la empresa en España la conforman personas con algún tipo de discapacidad.
Distribución de la plantilla por género
Distribución de cargos directivos por género