Saba mantiene acuerdos con numerosos operadores de alquiler de vehículos y sharing en distintas ciudades de España, Reino Unido, Italia y Chile. Estos servicios alcanzan las 1.250 plazas de aparcamiento aprovechando la capilaridad de la red de Saba, lo que permite el modelo free-floating, basado en vehículos que pueden ser recogidos y estacionados en cualquiera de estos hubs.
La compañía está preparada para el crecimiento de estos servicios y su progresión gradual hacia la electrificación, donde ya ha acumulado experiencia con servicios para patinetes y motos eléctricas. Más recientemente, Saba ha incorporado a su red a operadores de sharing con vehículos 100% eléctricos, gracias a su nueva política comercial que permite la carga vinculada. Al igual que un usuario privado, las empresas de sharing pueden beneficiarse del mismo sistema de plaza reservada con cargador eléctrico exclusivo. Estas iniciativas son el fruto de un esfuerzo constante por colaborar con fabricantes de coches y operadores en la búsqueda del mejor encaje tecnológico y comercial en sus instalaciones.
Elementos tecnológicos como la cobertura 3G en la totalidad del aparcamiento, junto al acceso, salida y pago a través de la matrícula, favorecen la implementación de estos servicios de valor añadido, que buscan ofrecer la mejor experiencia de cliente a sus usuarios.
PLAZAS DE SHARING
Aprovechar los beneficios de los aparcamientos subterráneos supone liberar espacio a pie de calle y minimizar el impacto en términos de espacio de aparcar miles de patinetes o bicis en plena calle
Las ciudades se adaptan progresivamente a una movilidad unipersonal, eléctrica y compartida en la que Saba puede tener un papel determinante en su correcta implantación. Aprovechar los beneficios de los aparcamientos subterráneos supone liberar espacio a pie de calle y minimizar el impacto en términos de espacio de aparcar miles de patinetes o bicis en plena calle. El aparcamiento también puede favorecer la sustitución y movilidad de las flotas que mantienen estos vehículos y dotarlos de un marco ordenado y de fácil acceso para los usuarios. Un hub de servicios sostenibles para personas como el que propone Saba es ya una realidad. Un elemento existente en el centro de las ciudades que permite luchar contra el cambio climático y desarrollar soluciones en el ámbito de la movilidad urbana y la innovación.
